Es una técnica con importantes ventajas, y por ello es probable que te decantes por ella.
Entre sus principales beneficios, se destaca que su resultado es más natural que en otros tipos de uñas (y con respecto a su precio, tiene un coste menor).
Las uñas de gel son también más fuertes, resultando muy cómodas, ya que dependiendo de la velocidad en que crecen tus uñas, solamente deberás rellenarlas cada tres semanas (aproximadamente).
En cuanto a la técnica en sí, no desprende olor, y se facilita el trabajo de esculpir la uña, porque no se está secando al hacerlo.
Otro beneficio, si eres de las personas que se muerden las uñas, es que podrás volver a tenerlas largas, siendo posible lucir una manicura ideal sin necesidad es esperar a que crezcan las uñas.
Resumiendo sus ventajas, las uñas de gel son la opción ideal si quieres tenerlas perfectas y no cuentas con el tiempo necesario para hacerte la manicura cada semana.